En la charla que tuve la suerte de dar en el Bar Camp Buenos Aires (#barcampba), hablé entre otras cosas sobre cómo las marcas se proponen ser parte de la vida de las personas.
Y eso está muy bien, en tanto los consumidores permitan o valoren estas intromisiones. En este escenario, digamos que todos “quedan contentos”: los usuarios reciben algo, las marcas “pasan sus avisos”, venden más. Todo bien.
Ahora, el problema sobreviene cuando las marcas se meten en la vida de las personas: las invaden, no las respetan, aún dándoles algo a cambio. Es que, me parece, primero están los valores, y luego los productos. El ejemplo de los Put Pocketers habla exactamente sobre esto: aunque me regalen dinero, si invaden mi territorio sin mi consentimiento, no lo quiero. No, gracias. Sobre todos, si son solo unos pocos pesos 😉
Hoy quiero compartir otro “buen mal ejemplo” de este fenómeno del marketing intrusivo. Se trata de la empresa Chubb Nord-Alarm Security Systems de Alemania, que para promocionar un sistema de alarmas hogareñas hace lo que vamos a ver en este video.
Aunque los resultados de venta demuestren que yo esté equivocado (permítanme desconfiar de los números expresados por algunos Contadores que arman resultados a medida de sus neceidades y bonus), creo que para una marca nunca es bueno mentir, invadir o engañar. Porque de lo que aquí estamos halando es sobre construcciones de marca: y ya sabemos lo que pasa cuando construimos en base a mentiras. El que tenga hijos, ¡seguramente les habrá dicho esto más de una vez!
Vos, ¿qué opinás?
Antes de empezar con las cosas que no coincido quiero felicitarte porque hay una muy buena recopilación de casos y la verdad que esta muy bueno el blog.
Ahora, no coincido en algunas de las cosas que ponés en la nota, salvo que las agencias mienten seguido los resultados de las acciones.
¿Que es lo que diferencia esta acción “intrusiva” con un comercial en la tanda? Y peor si es en cable por el que pago un fee mensual para tener un servicio? Me parece que es una muy buena idea que logra captar la atención sin mentir, y de una manera muy inteligente.
No creo que estén mintiendo al consumidor, aunque da la impresión que la acción esta más pensada en ganar premios que en ganar clientes porque el costo del envío de esa campaña es bastante alto, y veo dificil tener un buen retorno sobre la inversión si para colmo el exito se basa en los ingresos a la web.
Gracias por tu comentario (¡y sobre todo por los halagos!).
Respecto de tu observación, me parece que la diferencia entre un comercial de tele y este tipo de acciones tiene que ver con que en el primer caso el televidente tiene la opción de cambiar de canal, de bajar el volumen, de apagar el televisor. En el caso de estas acciones callejeras, hay una vejación porque no te preguntan si querés ser parte de una acción de marca. En este sentido, te fuerzan. Te obligan. Se meten en tu vida (o en tu casa) sin permiso.
En fin, son solo puntos de vista, y todas las opiniones son válidas así que gracias por dejar la tuya.
¡Un abrazo virtual y seguimos en contacto!