El director de gestión de productos de Google en Integridad de anuncios, John Canfield, anunció que la compañía extenderá su política de verificación de identidad para todos los anunciantes. Introducida en 2018, la función requería una política de que los anunciantes revisaran su identidad, que luego se mostraba como parte del anuncio en sí.
El proceso fue diseñado para crear una mayor transparencia, en medio de la creciente desconfianza en torno a las fuentes detrás de las compras de publicidad en los últimos años. En el futuro, la compañía hará que la verificación de identidad sea una parte obligatoria del proceso de compra de anuncios, independientemente del tema.
Se requerirán documentos de identificación personal y de incorporación comercial para todas las partes que compren un anuncio en la red de Google. Esa información comenzará a aparecer en los bloques de anuncios durante el verano, permitiendo a los usuarios hacer clic para ver información que incluye el nombre y la ubicación de la parte que compró el anuncio.
“Este cambio facilitará que las personas comprendan quién es el anunciante detrás de los anuncios que ven de Google y les ayudará a tomar decisiones más informadas al usar nuestros controles publicitarios”, describió Canfield. “También ayudará a respaldar la salud del ecosistema de publicidad digital al detectar malos actores y limitar sus intentos de falsificarlos”.
El proceso de verificación política está actualmente en marcha en 30 países. El impulso más amplio comenzará en Estados Unidos y se desarrollará a partir de ahí. Google dice que espera que todo tome “unos pocos años” en todo el mundo, dada la escala masiva de su red de publicidad. Una vez que los anunciantes hayan sido notificados, tendrán 30 días para completar el formulario. Los documentos serán revisados por un empleado de Google.
La vinculación de anuncios a personas y negocios reales podría ser muy útil para identificar a actores negativos en la red masiva.