Meses después de que la App Store de Apple introdujera etiquetas de privacidad para las aplicaciones, Google anunció que su propio mercado de aplicaciones móviles, Google Play, seguirá su ejemplo. La compañía anunció sus planes para introducir una nueva sección de seguridad en Google Play, que se implementará el próximo año, lo que requerirá que los desarrolladores compartan qué tipo de datos recopilan sus aplicaciones, cómo se almacenan y cómo se utilizan.
Por ejemplo, los desarrolladores deberán compartir qué tipo de información personal recopilan sus aplicaciones, como los nombres de los usuarios o los correos electrónicos, y si recopilan información del teléfono, como la ubicación precisa del usuario, sus archivos multimedia o sus contactos. Las aplicaciones también deberán explicar cómo utiliza esa información, por ejemplo, para mejorar la funcionalidad o con fines de personalización.
Los desarrolladores que ya se adhieren a prácticas específicas de seguridad y privacidad también podrán destacar eso en su lista de aplicaciones. En este frente, Google dice que agregará nuevos elementos que detallan si la aplicación utiliza prácticas de seguridad como el cifrado de datos; si la aplicación sigue la política de familias de Google, relacionada con la seguridad infantil; si la sección de seguridad de la aplicación fue verificada por un tercero independiente; si la aplicación necesita datos para funcionar o permite a los usuarios elegir si compartir datos o no; y si el desarrollador acepta eliminar los datos del usuario cuando uno desinstala la aplicación en cuestión.
Las aplicaciones también deberán proporcionar sus políticas de privacidad. Aunque está claramente inspirado en las etiquetas de Apple, existen varias diferencias clave. Las etiquetas de Apple se centran en qué datos se recopilan con fines de seguimiento y qué se vincula al usuario final. Las adiciones de Google parecen tener más que ver con si se puede confiar o no en que los datos que se recopilan se manejan con responsabilidad, al permitir que el desarrollador muestre si sigue las mejores prácticas en materia de seguridad de datos, por ejemplo. También le brinda al desarrollador una forma de argumentar por qué está recopilando datos directamente en la página de la lista.
Otra adición interesante es que Google permitirá que las etiquetas de datos de la aplicación se verifiquen de forma independiente. Suponiendo que estas verificaciones sean manejadas por nombres confiables, podrían ayudar a transmitir a los usuarios que las divulgaciones no son mentiras. Una de las primeras críticas a las etiquetas de privacidad de Apple fue que muchas proporcionaban información inexacta y también se salían con la suya.
Google dice que las nuevas funciones no se implementarán hasta el segundo trimestre de 2022, pero quería anunciarlas ahora para darles a los desarrolladores suficiente tiempo para prepararse. Por supuesto, hay mucha ironía en un anuncio de privacidad de la aplicación de Google.
La compañía fue una de las que más tiempo se resistió a emitir etiquetas de privacidad para sus propias aplicaciones de iOS, ya que se apresuró a revisar el contenido y las divulgaciones de las etiquetas. Después de afirmar inicialmente que sus etiquetas se lanzarían “pronto”, muchas de las principales aplicaciones de Google entraron en un período prolongado en el que no recibieron ninguna actualización, ya que no cumplían con las políticas de la App Store.
Google tardó meses después de la fecha límite en proporcionar etiquetas para sus principales aplicaciones. Y cuando lo hizo, los críticos, como el motor de búsqueda DuckDuckGo, centrado en la privacidad, se burlaron de la cantidad de datos que recopilan las aplicaciones como Chrome y Google.
El plan de Google de agregar una sección de seguridad propia a Google Play le da la oportunidad de cambiar un poco la narrativa. No es necesariamente un impulso de privacidad y ni siquiera se llaman etiquetas de privacidad. Los cambios parecen diseñados para permitir que los desarrolladores de aplicaciones expliquen mejor si se puede confiar en su aplicación con sus datos, en lugar de establecer la expectativa de que la aplicación no debería recopilar datos en primer lugar.
Queda por ver qué tan bien esto resonará con los consumidores. Apple presentó un caso sólido de que es una empresa que compara la privacidad del usuario y está agregando funciones que ponen a los usuarios en control de sus datos. Es un argumento difícil contra el que luchar, especialmente en una era en la que se vieron demasiadas violaciones de datos para contar, el manejo descuidado de la privacidad por parte de los gigantes tecnológicos, el espionaje gubernamental generalizado y una industria de la tecnología publicitaria espeluznante que creció hasta sentirse con derecho a la recopilación de datos de los usuarios sin divulgar.
Google dice que cuando se implementen los cambios, se requerirán aplicaciones que no cumplan con las normas para corregir sus violaciones o estar sujetas a la aplicación de políticas. Aún no detalló cómo se manejará ese proceso, o si detendrá las actualizaciones de la aplicación para aquellas que son infractoras.
La compañía señaló que se requerirá que sus propias aplicaciones compartan esta misma información y también una política de privacidad.