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El marketing basado en valores está ganando fuerza como una de las estrategias más efectivas para construir vínculos auténticos con los consumidores. Un reciente estudio internacional demostró que los anuncios alineados con los valores personales —como el éxito, el propósito o la tradición— generan hasta un 123% más de preferencia que los mensajes genéricos.

Cuando una marca logra reflejar lo que las personas consideran importante, no solo mejora su afinidad y relevancia, sino también su rendimiento publicitario. En otras palabras: comprender por qué la gente elige puede ser más poderoso que saber qué elige.

Qué es el marketing basado en valores

El llamado Values-Driven Marketing (VDM) parte de una premisa simple: los valores son motivaciones profundas que guían el comportamiento humano. Identificarlos permite anticipar cómo reaccionará cada persona ante un mensaje publicitario.

A diferencia de la segmentación tradicional —centrada en edad, género o nivel socioeconómico—, el VDM pone el foco en la psicología del consumidor. Se trata de entender qué impulsa sus decisiones, qué le da sentido y qué tipo de mensajes resuenan con su identidad.

Este enfoque responde mejor a los cambios del entorno, ya que combina ciencia del comportamiento e inteligencia artificial para analizar audiencias, optimizar medios y personalizar mensajes a gran escala.

Los valores que más mueven al consumidor

Según los datos del estudio, los seis valores más influyentes en la conexión entre personas y marcas son:
éxito, libertad, placer, propósito, seguridad y tradición.

Las campañas que reflejan estos valores logran mayor afinidad y lealtad. Por ejemplo, quienes valoran el éxito o el propósito reaccionan positivamente a mensajes que los inspiran a superarse o a sentirse útiles. En cambio, los consumidores con una fuerte inclinación hacia la tradición tienden a rechazar anuncios que contradicen sus creencias.

Esto demuestra que la coherencia entre valores y comunicación puede ser determinante en la percepción de una marca.

Cómo aplicar el VDM en las estrategias de marketing

Los especialistas que buscan integrar el enfoque de valores en sus campañas deben trabajar en cuatro áreas clave:

  • Inteligencia de audiencia: identificar los valores dominantes de cada segmento y sus necesidades emocionales. 
  • Planificación de medios: usar esos datos para definir dónde y cómo comunicar de manera más efectiva. 
  • Mensajes alineados: crear contenidos que hablen el mismo lenguaje que la audiencia, probando y ajustando en tiempo real. 
  • Medición de impacto: establecer métricas que evalúen cómo los valores influyen en la preferencia, la conversión y la lealtad. 

Combinado con datos demográficos, este método multiplica el poder predictivo de las campañas y mejora su precisión.

Más conexión, más resultados

El marketing basado en valores demuestra que las emociones y creencias son tan importantes como los datos. Conectar con lo que las personas valoran impulsa resultados inmediatos y, sobre todo, relaciones duraderas entre marcas y consumidores.

En definitiva, entender lo que importa a la gente es hoy una ventaja competitiva tan poderosa como cualquier innovación tecnológica.

¿Qué valores creés que más conectan con el público actual?
Dejalo en los comentarios y sumate a la conversación.

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