Los amantes de la música ya tienen una partitura para interpretar con calidad el ensordecedor sonido de las vuvuzelas, que tanta alegría provoca a quienes la tocan, y tanto fastidio a quienes las escuchamos.
Debajo, creatividad que muestra que siempre hay oportunistas a la hora de hacer buenas remeras. Que la sigan soplando, como diría Maradona…
