Los artistas Alex Schweder y Ward Shelley construyeron una rueda gigante de madera donde vivieron y trabajaron durante 10 días. Tienen heladera, microondas, un baño químico, camas, sillas, una mesa y ninguna ducha.
El motivo de vivir en una rueda para hámsters no es ni más ni menos que el amor al arte. La obra se titula “En órbita” y es una performance arquitectónica que intenta demostrar cómo la arquitectura moldea a través de sus espacios las relaciones entre las personas.
Fuente de Vivir en una rueda para hámsters