El fútbol es el deporte más popular del planeta tanto en público que lo mira como en quienes lo practican, pero siempre ha quedado atrás en aplicación de la tecnología.
Mientras que deportes como el hockey, rugby, basket y fútbol americano (por mencionar algunos) han logrado involucrar a la tecnología perfectamente, el fútbol ha sido de los grandes detractores en lo que respecta a la aplicación tecnológica.
Año tras año, distintas prácticas comienzan a insertarse en los reglamentos pero ninguna como lo ha hecho el Hoffenheim, un club alemán que hasta hace un par de temporadas era un modesto equipo que alternaba entre segunda y primera división y hoy se encuentra clasificado a la máxima competencia europea.
Pero, ¿qué es lo que ha hecho para ello?
Amén del talento deportivo y esfuerzo, el equipo ha sabido involucrar a la perfección tecnologías tanto durante los partidos como en los entrenamientos para perfeccionar los detalles de las jugadas y sus jugadores.
Mezclando la tecnología SAP con chips y Google Glasses han podido trackear la performance de cada uno de sus jugadores:
Con más de 70 millones de registros por hora de entrenamiento, los datos que recopila el sistema van desde el rendimiento de cada jugador hasta las mejores soluciones a tomar por ellos.
Otros métodos que ha aplicado el Hoffenheim de la Bundelisga a su método de competencia, en una era plagada de redes sociales han sido “Whatsapp”, no prohibiendo a sus jugadores que lo utilicen sino enseñándoles los riegos y las mejores formas de utilizarlo para que puedan llevar adelante su vida personal y profesional. Además, lo utilizan como medio de contacto entre el entrenador y los jugadores.
También utilizan el sistema HELIX, un monitor curvo que entrena la visión periférica en 180 grados y las afamadas Footbonaut para entrenar aspectos deportivos.
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